Y la
opereta mediática sigue. Y por supuesto, a pesar del secreto del sumario, el
“periodismo serio” sigue enterándose de todo lo que pasa en el juzgado de
Bonadío. Y si… ¿si no para que se arman estas operetas? ¿Para mantener todo en secreto?
Un detalle
que se me había pasado por alto es el muy curioso y casual hecho de que la ex
esposa del inimputable Centeno había estado declarando en el juzgado de…
Bonadío, por supuesto. Y los detalles llamativos siguen.
Otro:
Resulta que el chofer es amigo del sargento Pacífico. ¿Y quién es el sargento
(o cabo según algunos) Pacífico? El
Pacífico este resulta que, además de traficante de armas, es el denunciante que
hace 6 años se presentó a la Justicia y denunció que había escuchado una
conversación a sus espaldas en un bar en donde gente que no pudo identificar
hablaba de quedarse con la empresa Ciccone por parte de “un importante
funcionario del Ministerio de Economía” Que casualidad, ¿No?
Y ahora Boudou
está condenado y preso sin sentencia firme. Es que la gente en este país habla
de sus chanchullos a viva voz o directamente los lleva a cabo delante de sus
choferes y si hace falta se los detallan. Y si ven que el chofer escribe un
diario, con más razón lo hacen.
Este buen
escritor de diarios íntimos fue expulsado del Ejército por tirarle una granada
activada a un superior, causa por lo cual fue juzgado y declarado inimputable.
Detalle que supongo que en el ministerio lo sabían. Aun así, lo vieron tomando
nota de todo lo que hacia Baratta y lo siguieron manteniendo en el puesto.
Vamooooosss!!!!
Dicen que
los cuadernos hablan de coimas. Las fotocopias de unos cuadernos manuscritos
hablan de coimas. En la obra pública argentina. Chocolate por la noticia,
queridos biempensantes. Desde al menos
el año 2004 que vienen acusando al kirchnerismo de “recaudador” de la obra
pública. Nuestros queridos biempensantes. Pero lo hacen de una manera muy rara.
Piensan la
coima como un hecho unipersonal. O sea, que quieren hablar de coimas, pero sin
considerar a los pagadores como delincuentes y sin que entren en la
conversación los Macri. En suma, se trataría en verdad de coimas encontradas
detrás de un árbol. Y los “obligados a coimear” unos pobres empresarios forzados
a hacerse ricos por los inventores de la coima. Que son… ¡claro!, Néstor y
Cristina.
8 cuadernos
llenos de “datos” y resulta que el matrimonio coimero no pidió coima en la
mayor fusión empresarial durante le kirchnerismo que fue la de Cablevisión y
Multicanal, ahí se le chispoteó el negoción al matrimonio, che. O el chofer
escritor no se acordó de registrarlo.
El
“periodista” Jorge Lanata llegó a decir, durante el caso de José López que “no
tenía importancia quién daba la coima” Está claro que ahora le están lavando el
cerebro a la gente con una “verdad revelada por la divinidad San Magneto”: Solo
sería un corrupto el que recibe la coima.
El
empresario argentino que la da es solo un simple ciudadano en las garras de “un
matrimonio siniestro”. El que no entiende esto es mapuche-iraní. (Rinconet
dixit) Y que ganaban las licitaciones
por miles de millones de dólares por derecha. Y yo soy el Papa disfrazado de
pelado boludo.
Mejor no
recordarles a esta buena gente el Principio de Presunción de Inocencia
consagrado por nuestra Constitución porque se ponen locos. Si no me creen
escúchenla a la Stolbizer exigiendo que “Cristina demuestre su inocencia”.
Se
demuestra culpabilidad, Margarita. La Justicia se encarga de eso.
Se ve que
no sale mucho además de no tener internet. De no ser así se hubiera enterado
que algunas cosas cambiaron desde la inquisición. Ya nadie recuerda que como
concejala de Morón fue una acérrima defensora del proyecto de las cloacas que
les dejó a los Macri 1000 millones de dólares en sus cuentas bancarias, 5 años
de cárcel al intendente Rouselot y a la ciudad de Morón sin cloacas.
Pero la
famiglia zafó. Mucha coi…perdón, mucha suerte la de esta gente, sin duda. O son
muy emprendedores y meritócratas.
Pero ahora
nos quieren venir a hablar de coimas. Espero que a nadie le dé el soponcio por
lo que voy a decir: La coima existe desde el comienzo de la organización
humana. Y en EEUU la legalizaron. Le llaman lobby. Y en Argentina allanan el
edificio en donde vive Cristina porque una vecina denunció que escuchó “ruido a
caja fuerte”.
No vamos a
llegar a la pobreza cero, pero ya estamos en cordura cero. Peor es nada.
Y hay otra
cosita más: apareció en las oficinas de Abal Medina un pendrive. En donde
figurarían los nombres de los beneficiados por los “aportes voluntarios” de
empresarios. Si, de esos empresarios obligados a hacerse multimillonarios por
Néstor y Cristina. Hemos mejorado: dejaron las fotocopias atrás.
No, si
están envalentonados y afiladísimos nuestros biempensantes. Yo creo que la
bajísima catadura moral de quienes en estos momentos se están rasgando las
vestiduras por las coimas “unipersonales” está muy a la vista. El cohecho pasó
a ser “unihecho”. Baste recordar este pequeño listado de anteriores operetas
que (están todas caídas) recopiló la Abogada Graciana Peñafort:
Aníbal
Fernández resultó que no era la Morsa, tal como lo habían denunciado Carrió y
Wiñasky.
Mirian
Quiroga salió en los medios denunciando la existencia de valijas y bolsos de
Néstor y Cristina con millones de dólares. En la Justicia se desdijo y declaró
que ella solo quería publicidad para su libro por lo cual la "causa"
se cayó por inexistencia de delito.
Nilda Garré
y Máximo no tenían cuentas en el exterior. Y finalmente Clarín tuvo que
desdecirse, tarde y mal y sin pedir disculpas, por supuesto.
Luego de 3
años el Poder Judicial asumió que no había guerra con Irán y que por ende no
podía haber traición a la patria por parte de Cristina. Mientras tanto la salud
de Héctor Timerman se deterioró
terriblemente y Zanini y Delía estuvieron presos sin razón alguna.
La pericia
de los sobrecostos en la "causa" por el gas licuado era trucha y los
datos que usaron para hacerla habían sido bajados de Wikipedia. Roberto Baratta
estuvo preso por esa pericia trucha y Julio De Vido continúa aun preso y fue
sometido a un arbitrario desafuero.
El chofer
reconoció que los escribió el, pero ¿Cuándo? ¿En las fechas que dice que los
escribió? ¿O lo hizo en los últimos 6 meses? No lo podemos saber porque no es
posible peritar la tinta de los originales. Ni tampoco peritar la caligrafía.
Pero los empresarios
reconocieron ñañañaña. Si, es cierto, ¿pero de verdad reconocieron motu propio haber
pagado coimas o lo hicieron amenazados? ¿O acaso una vez que “entregan un k” no
se van para la casa y los que no aceptan haber pagado, siguen presos? El mismo
razonamiento se le puede aplicar al ex juez Oyarbide, tan odiado antes y ahora
tan amado por nuestros biempensantes.
Y hay más
hallazgos de la Doctora Peñafort: Gracias
a “la causa” de los cuadernos nos hemos podido enterar que CFK recibía al chofer en deshabillé, que
cualquiera entraba al dormitorio de Néstor y Cristina, que lo tenían lleno de
dinero y que llevaban bolsos cuando viajaban que “parecían” de dinero.
En serio,
¿no les hace ruido tanta “verdad revelada” dando vueltas por ahí?
Está todo
claro: si reconocen nuestros glamorosos empresarios haber pagado coimas, que es
un delito muy grave, gravísimo, pero siguen en libertad y no son echados como proveedores del Estado es porque es todo
un armado, una mentira. Una más de las tantísimas y ya clásicas operetas que
tanto odio han generado en tanta gente que se las ha creído.
Y el
detalle que falta: resulta que Cristina se robó 36.000.000.000 de dólares,
según el “periodismo serio”, ¿no? ¿Y donde están entonces? ¿Debajo del parquet
del departamento de Cristina? ¿Panamá Papers? No. ¿Seychelles? No. ¿Bóvedas en
la Patagonia? No.
Se
esfumaron, entonces. Y mira que hacen un bulto grande esos millones. Y parece
que les está costando encontrarlos, porque han comenzado a ofrecer recompensa a
quien sepa donde están. Y no es un dato menor que esos millones pesan 360.000
kilogramos. Si, 360 toneladas. Y si no los encuentran, se les cae todo.
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