Desde la
oposición en pleno viene acusando virulentamente al Kirchnerismo de querer
cooptar a la Justicia. Pero lean ustedes
esta nota aparecida, solo para suscriptores, en Ámbito Financiero.
¿Merecieron
los hechos relatados en esta noticia la virulencia a la que nos tienen
acostumbrados los ultra anti K? Yo no pude encontrar las furiosas denuncias de
la Doctora Carrió acostumbrada como está a recortar tapas de Clarinación,
meterlas en una carpeta y llevarlas a la Justica para denunciar la “corrupción
k”
Que
siniestros y corruptos que son los medios hegemónicos y su cohorte de políticos
comprados. Estamos ante una clara maniobra para controlar a la Justicia y no
aparece ningún cacerolero a proponer fecha para salir a la calle para “salvar”
a la CABA.
Y ni
hablar de Lanata, Nelson Castro, Blanck, Majul y etc., etc., etc. Todos los
biempensantes siempre en la misma vereda: la de la hipocresía. Si habremos
leído en los editoriales de los medios “independientes” y los comentaristas que
automáticamente los siguen que “la kk” quiere apoderarse de la justicia, y
miren ustedes como se vienen a deschavar los biempensantes.
Pongo a
continuación el link a la nota y también el desarrollo completo.
NUEVO CRUCE ENTRE GERENTES JUDICIALES DE MACRI
Divide
al PRO puja por el control de la Corte porteña
Por: Milton
Merlo
El cierre del año judicial volvió a dejar en
evidencia dentro del PRO las rencillas entre sus principales nexos con los
tribunales. La elección del presidente del Tribunal Superior de Justicia, que
debía ser un trámite veloz, sin sorpresas y que debía encumbrar nuevamente
a Luis Lozano, de buena sintonía con Mauricio Macri,
terminó en una dura interna entre éste y la jueza Inés Weinberg de Roca,
que habilitó los votos para que la presidencia terminara siendo para José
Casas, identificado con el radicalismo de la Facultad de Derecho.
El
desacuerdo que salió a relucir en la Corte porteña expresa, en realidad, la
tensión que durante todo el año existió entre los gerentes del macrismo para
los tribunales: Daniel Angelici y Fabián Rodríguez Simón. El primero
promocionaba una nueva presidencia de Lozano, mientras que el segundo jugó para
que Weinberg lograra un mayor protagonismo.
El
resultado podría tener un efecto inquietante, porque Casas avisó a Bolívar 1
que no desea presidir el tribunal y que planea renunciar a la presidencia a
fines de febrero. Con este escenario asumiría el vicepresidente, que viene a
ser Lozano, pero anoche el juez aseguraba no estar dispuesto a
hacerlo, especialmente luego de que dos magistradas cercanas al jefe de
Gobierno como Weinberg y Ana María Conde se inclinaran por
promover a Casas antes que votarlo a él. Además, Lozano no
aceptaba votarse a sí mismo. Ese escenario de acefalía dejaría al
tribunal en manos del juez de mayor edad, que es el caso de Alicia Ruiz, quien
integra el grupo Justicia Legítima.
Actualmente,
Ruiz ya tiene injerencia sobre la secretaría electoral del tribunal donde
reporta Alejandra Tadei, que, a su vez, es cercana a la legisladora
kirchnerista Gabriela Alegre. A esa posición sumaría la presidencia en un año
electoral durante el cual el tribunal es el encargado de fiscalizar las
elecciones en la Capital. Sería el peor escenario para el macrismo, que desde
hoy buscará abocarse a la tarea de que la presidencia quede o en manos de Casas
o en poder de Lozano, pero no de la jueza Ruiz.
Desde
el sector de Angelici arremeterán contra Rodríguez
Simón, a quien consideran responsable de la posibilidad de que Ruiz esté
a tiro de la presidencia. Será una puja de influencias ardua, porque Rodríguez
Simón es un hombre de consulta permanente para el jefe de Gobierno,
especialmente en las situaciones límite, como la toma del Parque Indoamericano
o los disturbios en el hospital Borda protagonizados por efectivos de la Policía
Metropolitana. En el entorno del abogado minimizaban esas reacciones y
recordaban que Angelici hace veinte días se encuentra en Europa en su condición
de presidente de Boca.
Ayer
la Legislatura debía votar el traspaso al Tribunal Superior de la Escuela
Judicial, que hoy en día está bajo la órbita de la Magistratura porteña. La
intriga entre los jueces del tribunal devino en que el proyecto quedara
archivado hasta nuevo aviso.
Ese
traspaso es impulsado por el titular de la Magistratura, Juan Manuel Olmos, pero
con un formato que amplía el consejo asesor del instituto de formación.
El
PRO vuelve a estar frente a un escenario que encuentra a Macri tironeado
entre las dos tribus de abogados que acompañan su gestión en la Capital, que le
han hecho ganar en forma rotunda todas las elecciones para la Magistratura y
que guardan grandes aspiraciones en caso de que el alcalde logre alzarse con el
premio mayor en octubre de 2015.
Malditos
hipócritas corruptos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario