El porque de este blog

El porque de este blog

En este blog editado por un peronista, kirchnerista, se puede encontrar una serie de post que abordan temas que creo son universales, mas allá de las particularidades propias de cada país.
Por sobre toda las cosas, a lo largo de todas mis humildes notas, apunto a mostrar la forma en que se comportó el Gobierno kirchnerista con respecto a la economía y también como se comporta la oposición, tanto mediática como política. Espero estar logrando ese cometido, de todos modos, todos los post están abiertos a comentarios que no son de ninguna manera moderados, son aceptados en su totalidad, por la simple razón de respetar a rajatabla la libertad de expresión y aclarar todas las dudas que los lectores puedan tener.
Aclaro que no soy funcionario del Gobierno Argentino, ni estoy pago por el Kirchnerismo, solo soy un trabajador empleado en el rubro hotelería, que apoya de manera clara y de frente las políticas aplicadas por Cristina Fernández de Kirchner.
Como debe ser: diciendo desde donde uno habla.
Por que la objetividad no existe, su "existencia" es pantalla de corruptos partidarios de ajustes criminales.
Porque la economía solo tiene dos maneras de ser manejada: desde las clases dominantes o desde las clases dominadas.

lunes, 10 de febrero de 2014

Civilización y barbarie

Desde siempre la derecha le ha dicho no a la intervención del Estado en la economía. A menos que sea para reprimir, ahí si les gusta que el estado intervenga. Una de las excusas que dan es que la desaparición del Estado (ya que de eso se trata la “no intervención”), va a permitir el “progreso de la nación”, o sea, más civilización.

Falacia total.

La desaparición del Estado es, sin posibilidad alguna de dudarlo, la barbarie. Es ya viejo el ataque al Gobierno proveniente de los sectores concentrados del campo, a la que se suman los oligopolios y los medios hegemónicos, centralizado en la necesidad de “no dañar al campo”, de “no perseguirlo”, en suma, de no cobrarle impuestos.

El famosísimo argumento de “que los impuestos son muy altos” lo conocemos todos, y serían además los que impiden el famoso “derrame” del que se llenaba la boca en los `90 el neoliberalismo se basa en el concepto de que el campo no tiene que pagar impuestos ya que tiene, al igual que cualquier empresario, el derecho a quedarse con toda la renta generada por su propiedad por que es lo natural.

Y no solo de la renta estamos hablando, ya que evaden, ¡¡¡y cómo!!! Los impuestos, que según afirman “pagan ellos” cuando en realidad los impuestos están incluidos en las estructuras de costos de los productos o servicios que se venden. Por lo tanto, los pagan los que compran.

Más claro: es de ellos solos, campestres y empresarios, el mérito de la riqueza generada en el país. Sostengo que para nada es así. Y repito, esa posición sustentada por los “meritorios” es simple barbarie, y que se basa en lo que se conoce como Derecho Natural.

El Derecho Natural transforma al individuo en un absolutista, un ser independiente, ilimitado que excluye cualquier relación. Esa forma de ser de la persona lleva irremediablemente a la desaparición de la raza humana por tener como consecuencia natural a la guerra. No por nada, en la sociedad moderna al derecho natural se le antepuso un orden artificial.

Decía Hobbes (pensador absolutista cristiano): …el derecho natural es equivalente a la libertad total que cada hombre tiene de usar su poder, propio del estado de naturaleza, hecho que lleva finalmente a la guerra.
Y es esa libertad total la que reclaman “el campo” y los empresarios y medios “objetivos, veraces (voraces) e independientes”. Esa libertad total solo puede conducir a que una nación quede reducida a escombros con muy pocas casas y vidas en pié.
Volvamos a Hobbes: Y es por consiguiente un precepto, o regla general de la razón, que todo hombre debiera esforzarse por la paz, en la medida que espere obtenerla, y que cuando no puede obtenerla, puede entonces buscar y usar toda la ayuda y las ventajas de la guerra, de cuya regla la primera rama contiene la primera y fundamental ley de la naturaleza que es buscar la paz y seguirla; la segunda, la suma del derecho natural, que es defendernos por todos los medios que podamos. De esta ley fundamental de la naturaleza, por la que se ordena a los hombres que se esfuercen por la paz, se deriva la segunda ley: que un hombre esté dispuesto, cuando otros también lo están tanto como él, a renunciar a su derecho a toda cosa en pro de la paz y defensa propia que considere necesaria, y se contente con tanta libertad contra otros hombres como consentiría a otros hombres contra el mismo.
Sin duda alguna, los que están en la oposición hoy día no tienen la mas mínima intención de mejorar nada de lo que falta o el kirchnerismo puede haber hecho mal, si no que quieren el derecho y la libertad absoluta, sin ningún deber que cumplir. Y para el resto, todas obligaciones.
El peronismo, y por lo tanto el kirchnerismo, es un partido absolutamente policlasista, por lo cuál no es posible, sostengo, acusar de hacerle la guerra a nadie, (a menos que regular la economía sea hacer la guerra) solo hablamos de inclusión, algo que a los que quieren vivir con todas las libertades sin límite, o sea aquellos que no quieren al Estado y mucho menos pagar impuestos, si se los puede acusar.
¿O acaso los sectores anti-Estado aman al obrero o al pobre en general? ¿O no son racistas y prejuiciosos? ¿Cómo se refieren a nosotros, los peronistas? Vaaaaaaamooooooosss!
La llamada especulación de los campestres por la retención de parte de la cosecha, no es tal, en realidad es una simple y clara declaración de guerra.
Suelen utilizar también otra gran falacia: “Argentina vive del campo”. Desde lo más básico se puede afirmar que cada uno vive de su trabajo, ya que si lo tiene es porque es absolutamente necesaria la presencia de su fuerza laboral. A menos que nos quieran convencer de que las patronales están haciendo beneficencia.
La nación existe porque es un trabajo diario y colectivo. El tipo que cultiva el campo lo puede hacer porque hay en la ciudad una persona que recoge los residuos todos los días, mal que les pese a todos los campestres. ¿Cuánto tiempo cree “el campo” que pueden subsistir las ciudades sin sucumbir a variadas enfermedades  sin la recolección de residuos?
¿Quién les va a reparar las rutas para que saquen sus cosechas? ¿Quién los va a atender en los hospitales privados? ¿Quién los va a atender en los puertos? ¿Quién les va a fabricar las maquinarias que necesitan? ¿Quién les producirá el combustible necesario para sembrar y cosechar?
¿Hace falta seguir? No existen en la realidad de ningún país los compartimientos estancos.
Solo es legítima su ley. La “ley del mercado”. O sea, la ley del campo y los empresarios, ya que ellos, y solo ellos, son “el mercado”.
Para más claridad: Desde el punto de vista de la filosofía del derecho, el iusnaturalismo (a veces se escribe "jusnaturalismo") mantiene que la legitimidad de las leyes del Derecho Positivo, esto es, el conjunto de leyes efectivamente vigentes en un Estado, depende del Derecho natural.

Desde este punto de vista, el que una ley haya sido promulgada por la autoridad competente cumpliendo los requisitos formales exigibles no es suficiente para que sea legítima. La posición contraria es el positivismo jurídico o iuspositivismo.


Recordar la 125 y la Ley de Medios.

John Locke, opositor al pensamiento de Hobbes en gran medida, nos legó algunos aportes que me parecen muy actuales:

“Por consiguiente, siempre que cierta cantidad de hombres se unen en una sociedad, renunciando cada uno de ellos al poder ejecutivo que les otorga la ley natural a favor de la comunidad, allí y sólo allí habrá una sociedad política o civil”.

¿Lo quieren hacer “el campo” y “los mercados”?

Un poquito más de Locke: “De lo cual se puede deducir que la monarquía absoluta, (Se dirige a Hobbes)  que algunos consideran como única forma de gobierno posible, es, de hecho, incompatible con la sociedad civil, y, por tanto, que no es una forma de gobierno civil absoluto. El fin de la sociedad civil es evitar y remediar los inconvenientes del estado de naturaleza que se siguen precisamente cuando cada hombre es juez y parte en sus propios asuntos, y ese remedio lo busca en la instauración de una autoridad reconocida, a la que cualquiera pueda recurrir cuando sufre una injuria, o se ve envuelto en una disputa, y a la que todos los miembros de la sociedad deben respetar. Allí donde existan personas que no disponen de una autoridad a la que apelar para que decida en cualquier diferencia que pueda surgir entre ellos, nos encontramos todavía en el estado de naturaleza. Y eso es, precisamente, lo que ocurre con cualquier príncipe absoluto en relación a aquellos que están bajo su dominio”.

Cambien monarquía y al príncipe por “el campo” y “los mercados” y agreguen la bondadosa compra de dólares por parte de Shell y verán que parece escrito en enero del 2014.

El enemigo creo que esta visibilizado, tal vez no lo suficiente, no nos confiemos, pero también es cierto que estamos desmovilizados, y eso es muy peligroso. Si algo de bueno tienen los cacerolos es que a pesar de los últimos fracasos, siguen intentando repetir aquellas caceroleadas gigantes.

Los que quieren la desaparición del estado, “los mercados”, la barbarie en suma, no se privan de nada. Por ejemplo, la nota de hoy, 9 de Febrero, de Mariano Obarrio en La Nación “informándonos” que el Papa había convocado al diálogo al Gobierno, sindicalistas y empresarios, “preocupado por la tensión en el país” resulto mentira, una más.

Están acostumbrados a mentir. Por caso pongo: “el peso se desvaloriza, por eso aumentan los precios” Y no es así, es a la inversa, el peso de desvaloriza porque esos entes, hasta ahora sin rostro, (¡¡Gracias a los afiches de la Cámpora!!) “los mercados”, aumentan sus precios en un mismo porcentaje que la devaluación y sin mostrarnos los cálculos científicos que lo justifiquen ni sus estructuras de costos.

Es así como nos pueden robar y destruir de paso al Gobierno.

¿Tenemos derecho de pensar que TODAS las acusaciones de corrupción hechas contra este Gobierno y los “finales de ciklo” son mentiras? Sostengo que sí.