El porque de este blog

El porque de este blog

En este blog editado por un peronista, kirchnerista, se puede encontrar una serie de post que abordan temas que creo son universales, mas allá de las particularidades propias de cada país.
Por sobre toda las cosas, a lo largo de todas mis humildes notas, apunto a mostrar la forma en que se comportó el Gobierno kirchnerista con respecto a la economía y también como se comporta la oposición, tanto mediática como política. Espero estar logrando ese cometido, de todos modos, todos los post están abiertos a comentarios que no son de ninguna manera moderados, son aceptados en su totalidad, por la simple razón de respetar a rajatabla la libertad de expresión y aclarar todas las dudas que los lectores puedan tener.
Aclaro que no soy funcionario del Gobierno Argentino, ni estoy pago por el Kirchnerismo, solo soy un trabajador empleado en el rubro hotelería, que apoya de manera clara y de frente las políticas aplicadas por Cristina Fernández de Kirchner.
Como debe ser: diciendo desde donde uno habla.
Por que la objetividad no existe, su "existencia" es pantalla de corruptos partidarios de ajustes criminales.
Porque la economía solo tiene dos maneras de ser manejada: desde las clases dominantes o desde las clases dominadas.

domingo, 29 de enero de 2012

Impresionante: Mensaje de Juan Domingo Perón a los Pueblos y Gobiernos del Mundo – Madrid 1972

Publicado por Manuel Anido el enero 26, 2012 a las 1:47am en:
http://sumateacristina.net/profiles/blogs/mensaje-de-juan-domingo-per-n-a-los-pueblos-y-gobiernos-del-mundo

Esto lo escribió el General Perón en el año...1972!!!!

Hace casi 30 años, cuando aún no se había iniciado el proceso de descolonización contemporáneo, anunciamos la Tercera Posición en defensa de la soberanía y autodeterminación de las pequeñas naciones, frente a los bloques en que se dividieron los vencedores de la Segunda Guerra Mundial.

Hoy, cuando aquellas pequeñas naciones han crecido en número y constituyen el gigantesco y multitudinario Tercer Mundo, un peligro mayor –que afecta a toda la humanidad y pone en peligro su misma supervivencia- nos obliga a plantear la cuestión en nuevos términos, que van más allá de lo estrictamente político, que superan las divisiones partidarias o ideológicas, y entran en la esfera de las relaciones de la humanidad con la naturaleza.

Creemos que ha llegado la hora en que todos los pueblos y gobiernos del mundo cobren conciencia de la marcha suicida que la humanidad ha emprendido a través de la contaminación del medio ambiente y la biosfera, la dilapidación de los recursos naturales, el crecimiento sin freno de la población y la sobreestimación de la tecnología, y de la necesidad de invertir de inmediato la dirección de esa marcha, a través de una acción mancomunada internacional.

La concientización debe originarse en los hombres de ciencia, pero sólo puede transformarse en la acción necesaria a través de los dirigentes políticos. Por eso abordo el tema como dirigente político, con la autoridad que me da el haber sido el precursor de la posición actual del Tercer Mundo y con el aval que me dan las últimas investigaciones de los científicos en la materia.

El ser humano ya no puede ser concebido independientemente del medio que él mismo ha creado. Ya es una poderosa fuerza biológica, y si continúa destruyendo los recursos vitales que le brinda la Tierra, sólo puede esperar verdaderas catástrofes sociales para las próximas décadas.

La humanidad esta cambiando las condiciones de vida con tal rapidez que no llega a adaptarse a las nuevas condiciones. Su acción va más rápido que su captación de la realidad y el hombre no ha llegado a comprender, entre otras cosas, que los recursos vitales para él y sus descendientes derivan de la naturaleza y no de su poder mental . De este modo, a diario, su vida se transforma en una interminable cadena de contradicciones.

En el último siglo ha saqueado continentes enteros, y le ha bastado un par de décadas para convertir ríos y mares en basurales, y el aire de las grandes ciudades en un gas tóxico y espeso. Inventó el automóvil para facilitar su traslado, pero ahora ha erigido una civilización del automóvil, que se asienta sobre un cúmulo de problemas de circulación, urbanización, seguridad y contaminación en las ciudades, y que agrava las consecuencias de la vida sedentaria.

Las mal llamadas "sociedades de consumo" son, en realidad, sistemas sociales de despilfarro masivo, basados en el gasto porque el gasto produce lucro. Se despilfarra mediante la producción de bienes innecesarios o superfluos y, entre estos, a los que deberían ser de consumo duradero, con toda intención se les asigna corta vida porque la renovación produce utilidades.

Se gastan millones en inversiones para cambiar el aspecto de los artículos, pero no para reemplazar los bienes dañinos para la salud humana, y hasta se apela a nuevos procedimientos tóxicos para satisfacer la vanidad humana. Como ejemplo bastan los autos actuales que debieran haber sido reemplazados por otros con motores eléctricos, o el tóxico plomo que se agrega a las naftas simplemente para aumentar el pique de los mismos.

No menos grave resulta el hecho de que los sistemas sociales de despilfarro de los países tecnológicamente más avanzados funcionan mediante el consumo de ingentes recursos naturales aportados por el Tercer Mundo. De este modo el problema de las relaciones dentro de la humanidad es paradójicamente doble: algunas clases sociales –las de los países de baja tecnología en particular- sufren los efectos del hambre, del analfabetismo y las enfermedades, pero al mismo tiempo las clases sociales y los países que asientan su exceso de consumo en el sufrimiento de los primeros, tampoco están racionalmente alimentados, ni gozan de una auténtica cultura o de una vida espiritual o físicamente sana. Se debaten en medio de la ansiedad y del tedio y los vicios que produce el ocio mal empleado.

Lo peor es que, debido a la existencia de poderosos intereses creados o por la falsa creencia generalizada de que los recursos naturales vitales para el hombre son inagotables, este estado de cosas tiende a agravarse. Mientras un fantasma –el hambre- recorre el mundo devorando 55 millones de vidas humanas cada 20 meses, afectando hasta a países que ayer fueron graneros del mundo y amenazando expandirse de modo fulmíneo en las próximas décadas, en los centros de más alta tecnología se anuncia, entre otras maravillas, que pronto la ropa se cortará con rayos láser y que las amas de casa harán sus compras desde sus hogares por televisión y las pagarán mediante sistemas electrónicos. La separación dentro de la humanidad se está agudizando de modo tan visible que parece que estuviera constituida por más de una especie.

El ser humano, cegado por el espejismo de la tecnología, ha olvidado las verdades que están en la base de su existencia. Y así, mientras llega a la Luna gracias a la cibernética, la nueva metalurgia, combustibles poderosos, la electrónica y una serie de conocimientos teóricos fabulosos, mata el oxígeno que respira, el agua que bebe y el suelo que le da de comer, y eleva la temperatura permanente del medio ambiente sin medir sus consecuencias biológicas. Ya en el colmo de su insensatez, mata al mar que podía servirle de última base de sustentación.

En el curso del último siglo el ser humano ha exterminado cerca de doscientas especies animales terrestres. Ahora ha pasado a liquidar las especies marinas. Aparte de los efectos de la pesca excesiva, amplias zonas de los océanos, especialmente costeras, ya han sido convertidas en cementerios de peces y crustáceos, tanto por los desperdicios arrojados como por el petróleo involuntariamente derramado. Sólo el petróleo liberado por los buques cisterna hundidos ha matado en la última década cerca de 600.000 millones de peces. Sin embargo seguimos arrojando al mar más desechos que nunca, perforamos miles de pozos petrolíferos en el mar o sus costas y ampliamos al infinito el tonelaje de los petroleros sin tomar medidas de protección de la fauna y la flora marinas.

La creciente toxicidad del aire de las grandes ciudades es bien conocida, aunque muy poco se ha hecho para disminuirla. En cambio, todavía ni siquiera existe un conocimiento mundialmente difundido acerca del problema planteado por el despilfarro de agua dulce, tanto para el consumo humano como para la agricultura. La liquidación de aguas profundas ya ha convertido en desiertos extensas zonas otrora fértiles del globo, y los ríos han pasado a ser gigantescos desagües cloacales más que fuentes de agua potable o vías de comunicación.

Al mismo tiempo, la erosión provocada por el cultivo irracional o por la supresión de la vegetación natural se ha convertido en un problema mundial, y se pretende reemplazar con productos químicos el ciclo biológico del suelo, uno de los más complejos de la naturaleza. Para colmo, muchas fuentes naturales han sido contaminadas; las reservas de agua dulce están pésimamente repartidas por el planeta, y cuando nos quedaría como último recurso la desalinización del mar nos enteramos que una empresa de este tipo, de dimensión universal, exigiría una infraestructura que la humanidad no está en condiciones de financiar y armar en este momento.

Por otra parte, a pesar de la llamada revolución verde, el Tercer Mundo todavía no ha alcanzado a producir la cantidad de alimentos que consume, y para llegar a su autoabastecimiento necesita un desarrollo industrial, reformas estructurales y la vigencia de una justicia social que todavía esta lejos de alcanzar. Para colmo, el desarrollo de la producción de alimentos sustitutivos está frenada por la insuficiencia financiera y las dificultades técnicas.

Por supuesto todos estos desatinos culminan con una tan desenfrenada como irracional carrera armamentista que le cuesta a la humanidad 200.000 millones de dólares anuales.

A este maremagno de problemas creados artificialmente se suma el crecimiento explosivo de la humanidad. El número de seres humanos que puebla el planeta se ha duplicado en el último siglo y volverá a duplicarse para fines del actual o comienzos del próximo, de continuar la actual "ratio" de crecimiento. De seguir por este camino, en el año 2500 cada ser humano dispondrá de un solo metro cuadrado sobre el planeta. Esta visión global está lejana en el tiempo, pero no difiere mucho de la que ya corresponde a las grandes urbes, y no debe olvidarse que dentro de veinte años más de la mitad de la humanidad vivirá en ciudades grandes y medianas.

Es indudable, pues, que la humanidad necesita tener una política demográfica. La cuestión es que aún poniéndola en práctica, ya con el retardo con que comenzaremos, no producirá sus efectos antes de fin de la década en materia educativa, y antes del fin de siglo en materia ocupacional. Y que además una política demográfica no produce los efectos deseados si no va acompañada de una política económica y social correspondiente. De todos modos, mantener el actual ritmo de crecimiento de la población humana es tan suicida como mantener el despilfarro de los recursos naturales en los centros altamente industrializados donde rige la economía de mercado, o en aquellos países que han copiado sus modelos de desarrollo. Lo que no debe aceptarse es que la política demográfica esté basada en la acción de píldoras que ponen en peligro la salud de quienes la toman o de sus descendientes.

Si se observan en su conjunto los problemas que se nos plantean y que hemos enumerado comprobaremos que provienen tanto de la codicia y la imprevisión humanas, como de las características de algunos sistemas sociales, del abuso de la tecnología, del desconocimiento de las relaciones biológicas y de la progresión natural del crecimiento de la población humana. Esta heterogeneidad de causas debe dar lugar a una heterogeneidad de respuestas, aunque en última instancia tengan como denominador común la utilización de la inteligencia humana. A la irracionalidad del suicidio colectivo debemos responder con la racionalidad del deseo de supervivencia.

Para poner freno e invertir esta marcha hacia el desastre es menester aceptar algunas premisas:
Son necesarias y urgentes: una revolución mental en los hombres, especialmente en los dirigentes de los países más altamente industrializados; una modificación de las estructuras sociales y productivas en todo el mundo, en particular en los países de alta tecnología donde rige la economía de mercado, y el surgimiento de una convivencia biológica dentro de la humanidad y entre la humanidad y el resto de la naturaleza.

Esa revolución mental implica comprender que el hombre no puede reemplazar a la naturaleza en el mantenimiento de una adecuado ciclo biológico general; que la tecnología es un arma de doble filo; que el llamado progreso debe tener un límite y que incluso habrá que renunciar a algunas de las comodidades que nos ha brindado la civilización; que la naturaleza debe ser restaurada en todo lo posible, que los recursos naturales resultan agotables y por lo tanto deben ser cuidados y racionalmente utilizados por el hombre; que el crecimiento de la población debe ser planificado sin preconceptos de ninguna naturaleza, que por el momento más importante que planificar el crecimiento de la población es aumentar la producción y mejorar la distribución de alimentos y la difusión de servicios sociales como la educación y la salud pública, y que la educación y el sano esparcimiento deberán reemplazar el papel que los bienes y servicios superfluos juegan actualmente en la vida del hombre.

Cada nación tiene derecho al uso soberano de sus recursos naturales. Pero, al mismo tiempo, cada gobierno tiene la obligación de exigir a sus ciudadanos el cuidado y utilización racional de los mismos. El derecho a la subsistencia individual impone el deber hacia la supervivencia colectiva, ya se trate de ciudadanos o pueblos.

La modificación de las estructuras sociales y productivas en el mundo implica que el lucro y el despilfarro no pueden seguir siendo el motor básico de sociedad alguna, y que la justicia social debe erigirse en la base de todo sistema, no sólo para beneficio directo de los hombres sino para aumentar la producción de alimentos y bienes necesarios; consecuentemente, las prioridades de producción de bienes y servicios deben ser alteradas en mayor o menor grado según el país de que se tratare. 

En otras palabras: necesitamos nuevos modelos de producción, consumo, organización y desarrollo tecnológico que, al mismo tiempo que den prioridad a la satisfacción de las necesidades esenciales del ser humano, racionen el consumo de recursos naturales y disminuyan al mínimo posible la contaminación ambiental.

Necesitamos un hombre mentalmente nuevo en un mundo físicamente nuevo. No se puede construir una nueva sociedad basada en el pleno desarrollo de la personalidad humana en un mundo viciado por la contaminación del ambiente, exhausto por el hambre y la sed y enloquecido por el ruido y el hacinamiento.

Debemos transformar a las ciudades cárceles del presentes en las ciudades jardines del futuro;
El crecimiento de la población debe ser planificado, en lo posible de inmediato, pero a través de métodos que no perjudiquen la salud humana, según las condiciones particulares de cada país (esto no rige para Argentina, por ejemplo) y en el marco de políticas económicas y sociales globalmente racionales.

La lucha contra la contaminación del ambiente y de la biosfera, contra el despilfarro de los recursos naturales, el ruido y el hacinamiento de las ciudades y el crecimiento explosivo de la población del planeta, debe iniciarse ya a nivel municipal, nacional e internacional. Estos problemas, en el orden internacional, deben pasar a la agenda de las negociaciones entre las grandes potencias y a la vida permanente de las Naciones Unidas con carácter de primera prioridad. Este, en su conjunto, no es un problema más de la humanidad, es el problema.

Todos estos problemas están ligados de manera indisoluble con el de la justicia social, el de la soberanía política y la independencia económica del Tercer Mundo, y la distensión y la cooperación internacionales;
Muchos de estos problemas deberán ser encarados por encima de las diferencias ideológicas que separan a los individuos dentro de sus sociedades o a los Estados dentro de la comunidad internacional.

Finalmente deseo hacer algunas consideraciones para nuestros países del Tercer Mundo:

1. debemos cuidar nuestros recursos naturales con uñas y dientes de la voracidad de los monopolios internacionales que los buscan para alimentar un tipo absurdo de industrialización y desarrollo en los centros de alta tecnología donde rige la economía de mercado. Ya no puede producirse un aumento en gran escala de la producción alimenticia del Tercer Mundo sin un desarrollo paralelo de las industrias correspondientes. Por eso cada gramo de materia prima que se dejan arrebatar hoy los países del Tercer Mundo equivale a kilos de alimentos que dejarán de producir mañana;
2. de nada vale que evitemos el éxodo de nuestros recursos naturales si seguimos aferrados a métodos de desarrollo, preconizados por esos mismos monopolios, que significan la negación de un uso racional de aquellos recursos;
3. en defensa de sus intereses, los países deben propender a las integraciones regionales y a la acción solidaria;
4. no debe olvidarse que el problema básico de la mayor parte de los países del Tercer Mundo es la ausencia de una auténtica justicia social y de participación popular en la conducción de los asuntos públicos. Sin justicia social el Tercer Mundo no estará en condiciones de enfrentar las angustiosamente difíciles décadas que se avecinan.
La humanidad debe ponerse en pie de guerra en defensa de sí misma. En esta tarea gigantesca nadie puede quedarse con los brazos cruzados. Por eso convoco a todos los pueblos y gobiernos del mundo a una acción solidaria.
JUAN DOMINGO PERON
21 de Febrero de 1972 – Madrid

¿Y? ¿que me cuentan?

miércoles, 25 de enero de 2012

Cristina y el cianuro de la oposición.

Estamos en medio de un debate. Y esto a pesar de que nos acusan de ser “ultra K”, “estalinistas” “autoritarios” y que “atentamos contra la libertad de expresión”, etc, etc, etc.

El asunto es mega-minería si o mega-minería no. La oposición, tanto ambientalista como política y mediática se opone, valga la redundancia, al proyecto de extracción de oro en Famatina.

Invocan destrucción ambiental y humana por el asunto del cianuro, veneno si los hay. Nos explican que debido a la capacidad de emponzoñar del cianuro la única situación posible es la contaminación y su consiguiente mortandad.
Eso en cuanto al cianuro de la oposición, porque, hete aquí, que existe también el cianuro descripto en la ciencia de la química.

Este también, oh casualidad, es extraordinariamente venenoso, pero ahí se terminan las coincidencias. Porque el cianuro que se describe en la química si bien es un elemento muy venenoso y peligrosísimo, es también, por ser algo que la naturaleza produce, degradable. Y además es recuperable después de haber sido utilizado en la extracción del oro.

Resulta y cito textualmente, que:

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Cianuro

El cianuro no es persistente ni asfixiante, ya que en la naturaleza se destruye por acción de la luz solar (por medio del ozono), descomponiéndose por oxidación en gases como COx y NOx. Creando cloratos y nitritos muy utilizados en la purificación del agua contaminada con plomo

Para la destrucción industrial del cianuro se utilizan cuatro métodos: degradación natural, oxidación química, precipitación y biodegradación. Existen tecnologías de reutilización o reciclado. El uso industrial y minero del cianuro debe ajustarse a normas estrictas, como las que aconseja el Consejo Internacional de Metales y Medio Ambiente, con sede en Ontario, Canadá

La Agencia de Protección del Medio Ambiente de EE. UU. (EPA) regula los niveles permitidos de cianuro en el agua potable por medio de sales de potasio. El nivel máximo de cianuro permitido en el agua potable es 0.2 partes de cianuro por millón de partes de agua (0.2 ppm). La Administración de Seguridad y Salud Ocupacional de U.E. (OSHA, por sus siglas en inglés) ha establecido un límite para el cianuro de hidrógeno y la mayoría de las sales de cianuro de 10 partes de cianuro por un millón de partes de aire (10 ppm) en el aire del trabajo.

Para la destrucción industrial del cianuro se utilizan cuatro métodos: degradación natural, oxidación química, precipitación y biodegradación. Existen tecnologías de reutilización o reciclado. El uso industrial y minero del cianuro debe ajustarse a  Ambiente, con sede en Ontario, Canadá

Nadie está afirmando que el cianuro es alimento, yo tampoco. Pero a las afirmaciones de la oposición le están faltando datos.

En cuanto a aplicaciones, cito, (misma fuente):

El cianuro se utiliza industrialmente desde 1889. En el sector industrial, el cianuro se utiliza para producir papel, pinturas, textiles y plásticos. Está presente en las sustancias químicas que se utilizan para revelar fotografías. Las sales de cianuro son utilizadas en la metalurgia para galvanización, limpieza de metales y la recuperación del oro del resto de material eliminado. El gas de cianuro se utiliza para exterminar plagas (ratas, ratones, lauchas, zarigüeyas etc.) e insectos en barcos, edificios y demás lugares que lo necesiten.

En este link: www.panoramaminero.com.ar/ICMME.pdf 

se puede bajar un documento mas que interesante sobre la minería de extracción de oro con cianuro. Es una versión traducida del inglés, versión que se puede encontrar en este link:

http://www.icmm.com/page/1616/the-management-of-cyanide-in-gold-extraction

Es más que obvio que el tema da para un largo debate. Pero está claro que en el debate hay algunas cosas ausente, y no es por culpa de los “ultra K”, sino que la ausencia se da por el lado del ambientalismo y la oposición: No exponen nada de esto cuando aparecen por los medios explicitando su respetable  posición.

Tampoco aclaran si les han entregado libros de química a los habitantes de Famatina. Pero también agregan una ausencia más: no hay propuesta alternativa a la prohibición de la mega-minería que proponen.  Es seguro que de impedirse el proyecto se caerán unos cuantos empleos, que sostengo que deben ser reemplazados por los que genere la propuesta de la oposición. Pero Nada.

Estas ausencias me permiten, creo, pensar un poco mal: estamos ante otra chicana en contra de Cristina. Seguimos en la misma: hay que darle como sea y con lo que sea al Gobierno.

Y no se trata tampoco de asegurar que no puede ser peligrosísimo el cianuro, sí se trata de dejar en claro que si se siguen al pié de la letra las estrictas normas que hay para el uso y manejo del cianuro, no hay peligro. Pero no está de más recordar que si las empresas, por el asunto de “optimizar costos” se “olvidan” de algún paso, vamos a estar en problemas.

domingo, 22 de enero de 2012

Humilde respuesta y bienvenida a PLATAFORMA 2012 Parte III

Link en donde leer Reflexiones sobre la desigualdad: http://plataforma-2012.blogspot.com/

En el primer párrafo de “Reflexiones sobre la desigualdad” vuelven a insistir con las violaciones a los derechos humanos. Qué triste. Qué triste que sigan acusando de criminal a este Gobierno sin aportar ninguna prueba.
Es una cosa maravillosa que un ser humano se dedique a ponerle el cuerpo a las reivindicaciones que en toda sociedad existen, como por ejemplo, la ampliación de derechos. 
¿Mentir y tergiversar serán derechos?
Son varias las veces que Plataforma 2012 a acusado al kirchnerismo de haber implantado un discurso hegemónico, pero sin embargo, y cito literal, en este documento dicen: “gran parte de los impulsores de Plataforma viene militando por sus convicciones en distintos espacios, en la calle y en los foros ciudadanos, en muchas ocasiones para dar audibilidad a voces sociales en clara asimetría”.
Gracias por reconocer que existen otras voces y espacios, que nadie ha sido enmudecido en este país bajo este Gobierno.
Afirman, además, que la distribución del ingreso en Argentina es difícil de medir, algo en lo que no estoy para nada de acuerdo. Pueden recurrir al Índice de GINI, al Banco Mundial, a la CEPAL, en fin, se puede elegir.
Dicen: “pero en casi todos los indicadores, la situación es aún peor que a comienzos de los ’90” Y no dan datos, fuentes, en fin, no dan aquello que confirme o respalde lo que dicen. ¿Cómo establecieron que estamos  peor que en 1990?
Un dato que seguro no muestra nada, pero algo es algo, ¿no?: PBI 1990: 200.000 Millones de dólares. PBI 2011: 400.000.000 (Tasa de cambio oficial)
Fuente: https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/geos/ar.html 
(Si, es la CIA que ustedes pensaron)
Sostengo que vuelven a mentir. Pero aceptemos que sea cierto, ¿que estarían demostrando con eso?
Que en el año 1990 todavía no estábamos como en el 2003.
¿Estancamiento?  Aumento del PBI 2011: 8%, Pueden tomar otras cifras menores, no me enojo, ya que todas coinciden en que aumentó, que es lo más importante.
Y sobre el alcance de la AUH, nuevamente afirman su inocuidad, basados en una fuente inobjetable: “también otros que señalan que la inflación existente habría neutralizado tal efecto”.
La recurrencia al latiguillo de la “ausencia de datos” deberían aceptar que es al menos un poco sospechosa, ya que hay datos de organismo internacionales disponibles en Internet y muy fáciles de encontrar, por otro lado. ¿Cuándo van a proponer  una auditoría de todas las fuerzas políticas en conjunto con organismos internacionales para relevar la situación del país? ¿O acaso no están seguros de lo que sostienen?
En el párrafo dedicado a las desigualdades, vuelven a tirar una serie de datos que habla de un país inserto en un infierno, que de ser cierto, convengamos que va a ser un poco difícil sacarlo.
Es innegable que faltan muchas cosas para hacer en este país, (si, son  asignaturas pendientes) pero si hacen un poquito de memoria, nada más, podrán recordar que hasta Cristina lo ha reconocido en sus discursos de campaña.
Pero vuelven sobre el Indoamericano, que es un lugar bajo jurisdicción del Gobierno de Mauricio Macri, por lo tanto, considero que el reclamo de tierras que llevó a su toma por parte de gente que vive en la CABA es algo de responsabilidad del Jefe de Gobierno de la Ciudad.
Pero, bueno ya que estamos, volvemos al Per Saltum: todo es culpa de Cristina, no hay nadie con responsabilidades o culpabilidades entre los hechos y el PE. Y con respecto al tema del despojo a las poblaciones indígenas y campesinas, es lo que ustedes dicen: que hay de propuesta, por parte de ustedes, para su solución?
 Cuando ustedes hablan de la concentración de poder en manos de Cristina me llama la atención un pequeño olvido: el de las 500 empresas, en su mayoría transnacionales y gigantescas, con capitales de decenas de miles de millones de dólares, que cuentan con medios periodísticas propios o corporaciones mediáticas, que como el Grupo Clarin, apoyan a esos gigantescos conglomerados financieros y económicos.
Eso es poder, real, fáctico, que es bueno recordar que no se somete a la voluntad de las urnas, como sí lo hacen los políticos en general, y Cristina en particular,  que detenta en estos momentos el poder político en uno de los poderes del Estado, porque en Democracia hay tres poderes, Ejecutivo, Judicial y Legislativo, que aun teniendo poder, no son el único, ya que está, repito, el poder que detentan las corporaciones.
La publicación de este manifiesto es una muy simple prueba de que no existe aquello que ustedes llaman “socavar la voz y la participación del pueblo”. Pero por si no alcanzara, traigo a colación nuevamente los 300 medios de Clarín, más  La Nación, Perfil, La Voz del Interior, Infobae,  Ámbito Financiero, La Prensa, El Cronista Comercial e infinidad de radios y sitios en Internet que son opositores.
No puedo entender cómo se animan a tergiversar y mentir de esta manera, ya que en este mismo documento reconocen que “gran parte de los impulsores de Plataforma viene militando por sus convicciones en distintos espacios,…” y aceptan además  “la presencia y fuerza de los grandes poderes económicos”. Aunque en este caso, lo hacen en la condición de cómplices con el Gobierno. Algo que con recordar la 125 y las varias centenas de tapas en contra de Clarín y La Nación desmiente tajantemente.
Es increíble, como al mismo tiempo que aceptan, ya que no tienen más remedio, pareciera, “lo que se ha realizado en estos años” puedan sostener que estamos estancados. Deberían aclarar la velocidad a la que según ustedes se deben ir logrando los cambios y las mejoras que faltan, velocidad que pareciera ser un privilegio del Gobierno establecer, ya que  “la presencia y fuerza de los grandes poderes económicos” no tienen nada que ver a la hora de analizar porque no se puede avanzar con más rapidez en la eliminación del trabajo en negro, por ejemplo.
Hablan del pensamiento crítico, que en este documento está expresado en la frase, “…todo ello no debería autolimitar la crítica, ni diluirla en un mar de elogios para con el gobierno”, pensamiento crítico que me pregunto si se puede aplicar, si lo aplican, a vuestra afirmaciones, algunas muy graves, como acusar a Cristina de asesina.
¿Cómo podríamos visualizar la aplicación del “pensamiento crítico” por parte de ustedes a este documento? Por ejemplo, ¿cuál sería el resultado de utilizar el análisis crítico en la frase:  “Se trata de que el gobierno ha establecido una estructura de alianzas con poderes económicos y políticos, en cada una de las provincias y áreas que controla, que hacen posible tales violaciones de derechos, en lugar de impedirlas” 
Se me ocurren: presunción de culpabilidad y Per Saltum. Esto es, que entre el hecho de que un criminal, que no sabemos nosotros ni ustedes a que intereses obedece, aprieta el gatillo, mata a alguien, y Cristina, hay un vacío, que debe ser salvado mediante un salto, que los lleva de manera directa a la culpabilidad indiscutible de un Gobierno que entre otras cosas, está logrando llevar a juicio y al castigo a los peores criminales que asolaron nuestra historia.
El federalismo está definido en la Constitución y es real, y no solo lo es para el caso del manejo autonómico de las distintas regiones, sino que también existe para el hecho de hacerse cargo de las decisiones tomadas por los responsables de cada jurisdicción y hechos derivados de las mismas.
Defender las “transformaciones realizadas” de ninguna manera es descalificatorio para quienes lo hacemos, sea Carta Abierta o ciudadanos de a pié como yo, si no que se trata  de un derecho, el de elegir en donde nos paramos, derecho que se visualiza además al lado de la coherencia: siempre hemos defendido y propugnado esas transformaciones, ¿por qué ahora no debemos reconocerlas o ponernos en contra de quien las lleva a cabo?  ¿¿¿¿????
Defender dichas transformaciones no nos han convertido de ninguna manera en autómatas, podemos visualizar de manera clara todo lo que falta. Lo visualizamos y lo reconocemos, tanto los compatriotas que integran Carta Abierta como los que somos simples militantes de última línea como el que esto escribe.
Insisto, no es por capricho o por “ceguera ultra k”,  si no porque vienen sucediendo cosas, que como el matrimonio igualitario o voltear el golpe de mercado del 23 de Octubre de 2011 permiten vivir en la seguridad de que seguimos avanzando.

sábado, 14 de enero de 2012

Humilde respuesta y bienvenida a PLATAFORMA 2012 Parte II

El manifiesto de PLATAFORMA 2012 a tenido dos novedades, a la fecha: retiraron la adición de comentarios y agregaron una nota firmada por los intelectuales Maristella Svampa y Roberto Gargarella.
En este link se puede leer los dos pronunciamientos: http://plataforma-2012.blogspot.com/

A Maristella Svampa y Roberto Gargarella

De mi mayor consideración.

Ya en el primer párrafo, derrapan.  Fue difícil en otras épocas, épocas de golpes de estado y democracias custodiadas muy de cerca. (Remember 26 planteos militares y 6 intentos de golpes de estado  a Arturo Frondizi).

A partir del año 1983, con el triunfo de Alfonsín, la cosa fue en constante mejoría, hasta llegar a la actualidad, actualidad que comienza especialmente en el año 2003, en donde sí se da el inicio de una oposición sistemática y muy dura, durísima diría yo, en contra del kirchnerismo.

Oposición que no fue reprimida, si contestada, confrontada, por el kirchnerismo, porque esa es la idea en un Estado de Derecho. Alcance, para comprobar la dureza, la nota de Claudio Escribano en La Nación, en donde nos anoticiaba que la Argentina se “había dado gobierno por un año”. Link para refrescarlo: http://www.lanacion.com.ar/496350-treinta-y-seis-horas-de-un-carnaval-decadente
Artículo fundador de una oposición sostenida por un odio descomunal que apenas pueden en la actualidad disimular.

Los debates, cuando se mediatizan, suelen simplificarse, cosa que se ha dado en estos tiempos también. Pero la cosa es un poco distinta a como la plantean ustedes: “pro-K o anti-K”. Es, sostengo, mucho más profunda, entre proyectos muy distintos, tanto a derecha como a izquierda del peronismo.

Hacia la izquierda nos topamos con que quieren estatizar todo. Y hacia la derecha, tenemos el genocida ajuste económico permanente, de larga y siniestra data en el país,  que podríamos ubicar su comienzo sistemático hacia el golpe del `76 y su final en el 2003, con la asunción de Néstor Kirchner.

¿Saben lo que creo? Las lecturas que hacen tanto a izquierda como a derecha se juntan en un punto, pero se equivocan medio a medio. A derechas creen que todo se va al infierno, y por ese motivo, la gente va a dejar de ser peronista, que le va a quitar el apoyo a Cristina. Y por izquierda, lo mismo: apuestan a un desastre que va a lograr que la gente se haga marxista.

Esta lectura se basa en el prejuicio de que se es peronista por una prebenda de comité. Grave error. Se los digo, porque parece que lo ignoran: somos peronistas porque tenemos profundos y arraigados valores éticos. Si les interesa conocerlos, los pueden encontrar en la Justicia Social.
No son pocos, en verdad, los intelectuales que vienen sosteniendo una “posición coherente”, pero solo de crítica, de crítica y acusacionismo, si me permiten el barbarismo.

Todo lo que sea construcción de espacios críticos y democráticos ya no tiene posibilidad de ser discutido, es  cosa simplemente deseada y bienvenida. Pero sería bueno que aclararan cuáles han sido “los temas y necesidades” planteados en el manifiesto. Sostengo que no hay nada más en dicho pronunciamiento que el repetir las acusaciones y mentiras de las tapas de Clarín y La Nación de los últimos 3 años.

Ser críticos de la última dictadura genocida, del menemismo y sus políticas neoliberales, defensores de la igualdad, de un Estado absolutamente presente, de los derechos humanos, o trabajando desde distintas disciplinas con los sectores más vulnerables,  no hace otra cosa que hablar muy bien y darles prestigio a ustedes.
Pero este prestigio se derrumba cuando hablan de “el nuevo ciclo de violaciones de derechos humanos” que estaríamos padeciendo en nuestro querido país. Se derrumba porque es una simple mentira. Simple y siniestra.

Por lo muy mal intencionada, digo. Toda sociedad, en su diario devenir, presenta conflictos, derivados de los problemas que en ella subyacen. Y la solución de todos esos problemas es algo no logrado por nadie en ningún país del mundo. Y no se logra en 24 o 48 horas, ni tampoco en 8 años.

¿Y saben por qué? Porque hay intereses, y muy fuertes, jugando en contra de las soluciones. Y la Argentina no es la excepción. Y tampoco el Gobierno tiene la suma del poder, tal como quedó demostrado con el tema de la 125.

Esos intereses son muy visibles en el tema de la inflación, por ejemplo. Cuestionan ustedes el INDEC, pero nada dicen de lo que en Economía se llama Inflación de Demanda, esto es, no invertir, por parte de los empresarios, las utilidades para satisfacer la mayor demanda, simplemente la contienen con el aumento de los precios. Y esto, que podríamos llamar “violación de derechos humanos”,  lo hacen los empresarios, no el Gobierno.

En cuanto a “los esquemas maniqueos”, este es una prerrogativa exclusiva de ustedes: no proponen nada, solo acusan, no hacen otra cosa, de todos los males reales que abundan en este bendito país, a Cristina, y si no alcanzan, los inventan. Pongo por caso la “asociación con la General Motors” afirmación de ustedes que contiene un subtexto acusatorio de las peores cosas que pueda hacer un ser humano.

Sin embargo, el hecho, público y notorio fue que en plena crisis del 2008/09, el Gobierno Nacional le otorgó a esa empresa un préstamo para solventar el desarrollo de un nuevo modelo de auto y el pago de medio sueldo a sus empleados, préstamo otorgado a 4 años de plazo, y que fue devuelto por la empresa en menos de 2. Creo que basta como prueba sobre la falta absoluta de veracidad de las acusaciones por ustedes vertidas.

En cuanto a la crítica que hacen a  “la fractura del pensamiento crítico”, por un lado, me parece que debe ser bienvenida, ya que va a provocar un debate más que interesante, y por el otro, ¿cuáles son las razones para que un intelectual deba ser solamente crítico? ¿Qué dirían ustedes si asumiera un Gobierno que hiciera todas las cosas que reclaman? ¿No defenderían sus “aciertos”?

La antinomia por ustedes remarcada, es cosa natural, ya que es insalvable que exista contradicción. Y lo que ustedes afirman que es “tener serias dificultades para tomar distancia crítica” no es otra cosa que ser coherentes, en el caso de Carta Abierta, con lo que siempre han reclamado: un Gobierno nacional y popular, inclusivo, que desarrolle la industria, que entronice la política, el debate y enfrente a los poderes fácticos, como lo hizo con la Ley de Medios y la reforma a las leyes de Quiebras y del Matrimonio.
Si siempre lo han reclamado y defendido, ¿por qué habría ahora de oponerse y criticar esos cambios? Es un delirio esto que afirman. Aunque se agradece que reconozcan que suelen “aparecer algunas críticas”, aunque valgan menos porque “son posteriores al elogio” Nadie es perfecto, muchachos.
Y vuelven ustedes a acusar de los hechos criminales acaecidos en las provincias como también de responsabilidad del Gobierno Nacional. Per Saltum, le llamo yo. Y como para estar a tono con el debate por ustedes solicitado y ver si podemos saldar esta cuestión, ¿no creen que ya es hora de ponernos a discutir esta acusación a la luz de las Constituciones, leyes de las provinciales y nacionales y los alcances del federalismo y ver que surge de ahí?
El poder político detentado por el Gobierno es algo por el cual han trabajado, así como han trabajado en la oposición para quitárselo. No tiene nada de malo que se tenga ni que se lo use, siempre, por supuesto, dentro de las reglas que marca el Estado de Derecho. ¿Cuáles han sido las reglas violentadas por el Ejecutivo aprobando las leyes que sancionó en uso de la mayoría legítimamente obtenida? Legitimidad por ustedes reconocida, es justo aclarar. Cuando hablan de “concentración de poder político en manos del ejecutivo” se olvidan de mencionar de la concentración de poder de que disponen los sectores empresarios y financieros, olvido muy avieso, sostengo.
Lo que desmiente de manera tajante, además, una “diabólica” hegemonía del Gobierno. También olvidan mencionar los 2 años en que la oposición tuvo mayoría absoluta en el Congreso, mayoría que no dio ninguna ley, a pesar de que hace ya un par de años también que el GAFI venía solicitándole al Gobierno la sanción de leyes anti-lavado y anti-terroristas, reclamo apoyado por todos los medios opositores, en los cuales muchos de ustedes editorializan.
¿Cómo es que siendo “los buenos” no sacaron una ley antiterrorista perfecta?  La realidad nos muestra que “la nueva Ley Antiterrorista ha elegido un camino que impide cualquier forma de aplicación irracional”, no como tergiversan ustedes.
Lo que hace esta Ley es “agregar  un agravante de conductas que ya se encontraban tipificadas como delito en el Código Penal. Esto es que quien con su conducta no perpetra ningún delito no puede por el simple hecho de “producir” terror convertirse en pasible de una sanción penal”.
Queda más que claro “que para que pueda predicarse de terrorista cierta acción, esta antes deba ser una acción delictiva. Luego de ser calificada como delictiva se pasa al análisis de si puede o no calificarse, además, de “terrorista”. Si efectuar un corte de ruta u otra forma de protesta social no eran delitos hasta ahora, tampoco lo serán con la nueva ley. Lo mismo sucede con la difusión de noticias, incluso falsas, de índole económico”.
Fuente: http://misionesparatodos.com.ar/2011/12/una-replica-a-las-criticas-a-la-ley-antiterrorista-por-paola-spatola-2/
Y de paso, ya que estamos, ¿por qué no aclaran cuales son las leyes “malas” y porque y cuáles son los cambios que ustedes proponen?
Cuando acusan de “agravamiento de las desigualdades y desposesión” ¿se refieren a la entrega de más de 3 millones de netbooks y a la construcción de 1700 escuelas? ¿O  describen a la Asignación Universal por Hijo? ¿A las 800.000 viviendas construidas?
También deben estar hablando del aumento del PBI, del consumo en supermercados, del record de venta de 0KM y usados, de las paritarias, del Matrimonio Igualitario, de la cancelación de deuda con el FMI y el rechazo a sus directivas y presiones, anulación de leyes de impunidad y juicios a los genocidas, Planes  “Nacer”  y “Remediar”, de cobertura gratuita a embarazadas y niños hasta 6 años y entrega de medicamentos, también gratuita, a mas de 15 millones de personas.
Créanme. La lista es muy larga, por eso les pongo un link que los enumera:   http://www.comunidadk.com.ar/f5/logros-del-kirchnerismo-dani-tilca-1005/

Y tengan la plena seguridad que de ninguna manera nos olvidamos de los muertos, de nuestros muertos, sean de la fecha que sean. No nos olvidamos ni nos tragamos que de los 14 a los que ustedes hacen referencia, la culpa es de Cristina. Sostener que solo el kirchnerismo está haciendo política en el país es una muy infantil falacia. Hay muchos más.

Y sostengo que varios son bastantes sucios, hasta acusan a pobres ancianos jubilados de ser cómplices de parricidas.

¿Y en base a que argumentación sostienen ustedes que los muertos del Indoamericano no son obra planeada y ejecutada por el macrismo? En política, cuando no se sepa o no haya acuerdo sobre quién cometió un crimen, solo hay que averiguar a quien benefició.
Y pareciera que el Gobierno hace proselitismo matando gente, ¿verdad? Porque eso es lo que sostienen ¿no? Que este es un Gobierno represor y asesino.  ¿Cuántas veces, desde los medios opositores, han criticado la “pasividad” del Gobierno Nacional ante piquetes y cortes de rutas? (¿Se olvidaron del piquete campestre ya?)
Y si sabremos nosotros, los del campo Nacional y Popular lo difícil que es superar los esquemas hegemónicos, binarios o antinómicos.
Pero el país con 20 periodistas asesinados en los últimos 2 años, es Honduras, no la Argentina.


domingo, 8 de enero de 2012

Humilde respuesta y bienvenida a PLATAFORMA 2012



 Recientemente fue dado a conocer un manifiesto firmado por un grupo de intelectuales opuestos y muy críticos al Gobierno Nacional. Realmente es una muy buena noticia. Lo mejor que le puede pasar al país en general y al kirchnerismo en particular es que la nación toda se ponga a debatir, ya que, sostengo,  el peronismo se sustenta en profundos valores éticos y morales y tiene la suficiente altura intelectual como para afrontar  cualquier debate. Pero me parece que por desgracia, eso no se va a dar, no por falta de voluntad para debatir por parte del kirchnerismo, sino porque veo en este manifiesto más de lo mismo: acusaciones, acusaciones y más acusaciones, algunas muy graves, como la de que Cristina es una criminal,  como podrán apreciar al leer, en este link, el manifiesto:
 http://plataforma-2012.blogspot.com/


Promover el debate de ideas es algo en el que sin duda estaremos de acuerdo la gran mayoría. Y en el primer párrafo ya ustedes tiran una: “Escaparle a los efectos nocivos del discurso hegemónico”. Totalmente de acuerdo.
¿Cómo? ¿Que el discurso que ostenta  la supremacía es el del Gobierno? Para nada es así. El monopolio de la fabricación del papel para diarios lo tienen La Nación y Clarín. Este último  gracias a los aprietes que esa posición de “debilidad” le permitió, tiene 300 medios diseminados por todo el país. Pero por supuesto, es fácil darse cuenta que con 300 “débiles” medios es algo casi imposible lograr tener un discurso hegemónico.
Ustedes hablan de escándalos, y como no aclaran cuáles, algo raro en quienes hablan de promover debate, debo suponer que se refieren a las constantes y mediáticas denuncias realizadas por los enclenques medios como Clarín y La Nación.
Una de las primeras cosa que deberían ofrecer para el debate, son precisamente esas denuncias, ya que muchos sospechamos que son simples mentiras.
En cuanto a la construcción de un relato por parte del Gobierno, construcción a la que tiene un derecho inalienable, deberían aclarar cuáles son las razones en las que se basan para definirlo de mentiroso.
Aclarando un poco más: construir un relato, sea quien fuere el que lo haga, es un derecho humano básico, por lo tanto, se puede debatir el contenido que se le está dando a ese derecho, pero no el derecho mismo. Se desprende de vuestra afirmación que el relato verdadero es el de ustedes, entonces, ¿cuál sería el problema, y para que debatir?, ¿no les parece?
Transcribo literal: “No encontramos este ánimo en algunos trabajadores del campo de la cultura, a quienes hemos respetado y queremos seguir respetando, pero que al colocarse como voceros del gobierno han producido una metamorfosis en relación con su historia y su postura crítica”. (El remarcado en negrita me pertenece)
Preguntas: ¿solo se puede ser opositor?  ¿Cuáles son las razones y las pruebas de que se es oficialista a cambio de un pago? ¿En base a que se sostiene que solo siendo opositor se es independiente, veraz y crítico? ¿Cómo debemos entender el Estado de Derecho si ser oficialista no se puede? ¿Están dispuestos a debatir la existencia de los poderes fácticos? Esto es, ¿el poder de los bancos, de las grandes empresas transnacionales? ¿Debatiremos que hay intelectuales y periodistas trabajando para esos poderes? Este concepto, “oficialista no se puede ser”, ¿va a estar incluido en el  debate propuesto por ustedes?

El federalismo da continente a las actividades provinciales. Existe una total autarquía en los estados provinciales. Tienen sus propias Constituciones, sus propias Cortes Supremas, sus propias policías provinciales, etc. Sus propias responsabilidades, en suma.
Pero pareciera ser que han decidido, unilateralmente, la utilización de un tipo de  Per Saltum al que le agregan la presunción de culpabilidad, que parecieran ser “principios” muy arraigados en la intelectualidad opositora.
El Per Saltum porque de la ejecución de los crímenes por matones o policías provinciales, o asesinados en zonas liberadas para el accionar de criminales patotas sindicales, referenciadas en políticos opositores, pasan a Cristina como culpable de manera directa, no hay nadie en el medio que para ustedes merezca al menos un mínima sospecha de responsabilidad, ni hablar de culpabilidad.
Y la presunción de culpabilidad, aplicada con fruición solamente al Gobierno Nacional vendría a reforzar la objetividad, la independencia y veracidad del Per Saltum, ¿no?
¿Van a someter a estos “principios al debate? ¿Van a someter a debate sus críticas, tantas veces vertidas, a la política de no criminalización de la protesta social por parte de los Gobiernos de Néstor y Cristina?
 Acusan de criminal a Cristina, ¿no les parece que es algo muy grave? ¿Qué es algo que debería ser probado ante la Justicia? ¿Que debería ser debatido? ¿Reconocen que todas sus acusaciones son mediáticas y debatibles?
Coincidimos totalmente al ubicar a la carencia de tierras como un disparador de la desesperación de la gente. Y esa tierra tiene un propietario. Siempre lo tuvo, y son los pueblos originarios. ¿Qué les parece la idea de debatir que hacer con las tierras que están en manos de los integrantes de la  Sociedad Rural, por ejemplo? ¿O que proponen ustedes?
¿Por qué no proponen, de paso, como combatir el “proceso de concentración de la tierra y la soja-dependencia de los últimos 8 años”? Pareciera además que no importaría aclarar que la soja dependencia comenzó en nuestro país en 1996, ni tampoco aclaran si apoyarían una política que obligara a los sojeros a criar ganado, por ejemplo.
El explayar, el dar a conocer su relato, vuelvo a recordarles, es un derecho inalienable para cualquier ciudadano, derecho que con este manifiesto ustedes también están disfrutando.
La recuperación de 5.500.000 de puestos de trabajo, la Asignación Universal por hijo, la construcción de 800.000 viviendas, mas de 1700 escuelas, la entrega de 3.200.000 netbooks a alumnos de secundarios y 1.000.000 de decodificadores de televisión digital a personas en riesgo de exclusión, que también pueden sintonizar canales opositores, el incremento del PBI deja bastante claro que la única persistencia está dada por el lado de las políticas inclusivas.
Y claro que todavía falta. O levantar un país que estaba en la ruina como estaba la Argentina en el 2003 creen ustedes que se puede hacer en 24 o 48 horas. No. Puede llevar generaciones.
Cuando afirman lo de “relato disciplinador y engañoso” no hacen otra cosa que persistir en la tergiversación de la realidad social argentina: el relato del gobierno, al que, repito, tiene derecho de emitir, no es el único relato que hay en el país.
Los 300 medios en poder de Clarín y que son públicamente reconocidos como de su propiedad por el Grupo, prueban la falsedad de la aseveración. Baste repasar las tapas de Clarín y La Nación, los únicos medios hegemónicos, de los últimos tres años.
También podemos agregar los innumerables sitios opositores en Internet, medios periodísticos on line, la cantidad inmensa de editoriales en contra del Gobierno, tanto on line como en papel. ¿De qué hegemonía estatal están hablando?
Critican  la minería. ¿Hace falta aclarar que existe desde hace miles de años?
¿Qué proponen? ¿Cerrar las mineras? Deberían aclarar al menos qué hacer con los miles de desocupados que nos quedarían.
Asimismo, se refieren a las cerealeras, que es cierto que concentran la mayor parte de la exportación, pero además de ser un problema heredado, como tantísimos otros, no mencionan la política recientemente consensuada con Agricultores Federados Argentinos, miembro de la Federación Agraria Argentina, que incluye la entrega de tierras fiscales y una línea de créditos para la construcción de un puerto propio en Rosario y así poder exportar por fuera de las cerealeras. Esto es eliminación, lisa y llana, de privilegios.
Critican el supuesto otorgamiento de privilegios a Clarín, critican que el Gobierno acuse y demuestre que Clarín miente. Pónganse de acuerdo, por favor, ¿o acaso no acusan al gobierno de hegemónico? Por lo tanto el haber entregado privilegios al Grupo Clarín no estuvo tan mal, ¿no les parece? Al fin y al cabo, se le da un privilegio a un “débil”
Acusan al kirchnerismo de ensanchar la brecha de desigualdad. Mentira absoluta. El Índice de Gini y el Informe de la CEPAL, que se pueden conseguir fácilmente en Internet desmienten categóricamente la afirmación.
Y agregan a la mentira la omisión de que también la pobreza que todavía queda por solucionar en Argentina es heredada. Y no es un detalle menor, dado el nivel de pobreza existente en el país hacia el año 2003
Es muy llamativo, ya que es muy fácil comprobarlo leyendo las notas de famosos periodistas como Morales Solá, Mariano Grondona, Luis Majul, Alfredo Leuco, Pepe Eliaschev, Marcelo Bonelli, Julio Blanck, Eduardo Van der Koy, Jorge Lanata, Rosendo Fraga, o repasando los foros de las noticias de La Nación, que acusen al Gobierno de descalificador y estigmatizador, cuándo la forma de referirse por parte de todos ustedes a cualquier partidario del kirchnerismo es “ultra k”, “los k”, “los choripaneros”, el “aluvión zoológico”, “cabecitas negras” o que concurrimos a las manifestaciones o apoyamos a Cristina a “cambio de un dinero”. ¿Son todos conceptos elogiosos?
Y ni hablar de las acusaciones mediáticas de todo tipo hechas de a cientos en contra del equipo gubernamental. Como muestra, ofrezco las que hacen en el manifiesto por ustedes publicado.
Sería muy bueno que puntualizaran cuales son las trivializaciones y las bravatas para así poder debatirlas.
Cuando desde el programa  678, ya que a él se refieren, pasan el video de la Dra. Carrió diciendo: “la gente los quiere matar”, “la gente nos pide que los derroquemos”, “Kirchner va a salir a matar gente” no se está produciendo una encerrona ni obligando al silencio a nadie ni sacando de contexto nada, es lo que dijo y esas frases tienen significado por si solas.
El derecho de huelga es constitucional e inalienable. Pero si un grupo de maestros en huelga bloquean una petrolera, como pasó en la Provincia de Santa Cruz, deberían aceptar que se parece bastante a una extorsión.
La Ley Antiterrorista es una ley reclamada por el GAFI desde hace mucho tiempo,  reclamo llevado a cabo con el muy poco disimulado apoyo por parte de los medios realmente hegemónicos.
Tantas veces Clarín y La Nación a través de sus periodistas estrellas, han criticado que Argentina no cumpliera con lo reclamado por el GAFI. ¿Cómo es que lo han olvidado? ¿Cómo es que hablan de estar obligados al silencio, si en todos los medios opositores se pueden leer decenas de notas diariamente en contra del Gobierno? Basta recorrer todo lo que dijeron durante el golpe de mercado iniciado el 23 de Octubre como prueba.
Pero igualmente bienvenidos al debate. Pero a no olvidar que para debatir hay que proponer ideas y soluciones, no dedicarse solo a la acusación mediática sin fundamento. Y que a veces se puede pedir y dar revancha, que en política eso permite continuar con el debate y enaltecerlo también.


miércoles, 4 de enero de 2012

La derecha como ejecutora del mal.

Lo sigo sosteniendo: la oposición esta recargada, corregida y aumentada. Y no estoy diciendo que fue algo liviana en cuanto a su virulencia. Sí ha sido absolutamente liviana en cuanto a hacer política en serio. El hacer política, la sí-política, si se me permite la licencia, ha estado más que ausente de sus intencionalidades y accionar.
¿En qué me baso para tal afirmación? Solo “acusacionismo” ha hecho la oposición. Acusar, acusar, acusar. Recordemos solo dos: “Aduana paralela”, y el más reciente caso Schoklender. Y la pobreza. Como han reclamado y acusado al Gobierno Nacional por los pobres. Y en verdad los hay en el país, entendiendo como pobres a aquellos que no tienen trabajo y sólo poseen como modo de vida alguna changa o ayuda estatal.
Entonces mandan un movilero, visitan a una persona o a una familia, la muestran luego por el canal, y conmueven, porque la miseria siempre conmueve, y no está para nada mal que los medios denuncien y muestren las carencias. Pero hay un pequeño detalle, mejor dicho, dos, que aviesamente,  a uno olvidan mencionar y al otro lo mencionan claramente.
Primero, que la miseria que todavía tenemos es heredada de las “gloriosas” épocas  neoliberales, muy patrocinadas por algunos de los actuales “defensores de pobres”,  y lo que me parece muy siniestro y manipulador, es que muestran ese o a varios casos similares como la única realidad, como lo único que pasa en el país, en suma, “demuestran” que todos estamos en la miseria.
 La conclusión a la que llegan y con la que bajan línea estos “defensores de pobres” es entonces muy simple: nada ha hecho el kirchnerismo por la gente, por los pobres. La negación absoluta. Negación y tergiversación.
Porque sostener que el Gobierno no ha hecho nada para combatir la pobreza es algo que el clásico latiguillo usado por los “biempensantes” se encarga de desmentir, cuando se da una ayuda: “Le dan plata a los vagos”. ¿En qué quedamos? ¿Hace o no hace el gobierno? ¿Los pobres son pobres o son vagos? Si se los ayuda, el Gobierno hace “clientelismo”, si no ayuda, está todo el país mal por culpa de Cristina.
Lo que más claro deja esta forma de la no-política, es el caso de los subsidios. Hace años que vienen diciendo que son un derroche, y ahora que el gobierno los va aplicar muy selectivamente, esto es, solo al que los necesite, dicen que el Gobierno está haciendo ajuste, que está atacando y dañando gravemente a la clase media.
El caso paradigmático es el del Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que, como opositor que es, también venía diciendo desde hace años que los subsidios son “un derroche”, pero cuando le ofrecieron el traspaso de la administración de la concesión de los subterráneos, exigió subsidios por… ¡6 años más!
Y así llegamos al caso de la Ley de democratización del papel prensa. Se han dedicado los últimos días a “aclararle” al mundo que la Ley es un artero ataque a “la libertad de expresión”. Pero por supuesto, en ninguna nota han publicado el articulado de la Ley. Como para que todos los lectores, digo, comprueben que ellos son los que dicen la verdad.
Y ni hablar de los foros en internet, en donde encontramos verdaderas cloacas, foristas que hacen gala de una capacidad superlativa para el insulto, la descalificación, la injuria. Y que después acusan al kirchnerismo de ser “confrontativo y crispador” ¿A que se deben estas cuestiones de las acusaciones, contradicciones, tergiversaciones, hipocresías y mentiras, vertidas a granel y sostenidas en el “principio” de la presunción de culpabilidad, “principio” aplicado con verdadera fruición  por el conjunto de la oposición? ¿Qué no pueden ser oposición por estar bajo un “régimen”?
El hecho de que dicen las peores cosas que se puede decir de un ser humano, cosas que creo en algunos casos no se dicen ni del diablo, desmiente tajantemente que haya algún límite a la libertad de expresión. Y no debemos olvidarnos que por un proyecto de Cristina, se despenalizaron las calumnias e injurias en lo referente a las cuestiones públicas.
Volviendo a la presunción de culpabilidad, debemos tener presente que es el sustento con el cual la oposición lleva a cabo todas sus acusaciones. Especulan con la posibilidad de que la gente también se maneje con la presunción de culpabilidad, esto es, que baste solamente la acusación mediática para que alguien sea declarado culpable sin atenuantes. Me parece que están acertados, hay gente en este país que se maneja con este “principio”, aberración barbárica si las hay.
Desconozco si existe alguna posibilidad de subsanar este absurdo, pero estoy seguro que parte de la solución al problema que presenta el poder que tiene este extravío de la presunción de culpabilidad es hacer constar clara y permanentemente su presencia en las acusaciones que vierte la oposición.
Indudablemente la oposición tiene que tener ideología, no hace falta que lo explicite. Por lo tanto, ya que insisten en que estamos en un desastre, que esta Administración hace todo mal, que se viene la hecatombe, pueden exponer su proyecto. Pero no lo hacen. Remarcan constantemente que todo está corrupto en este Gobierno, por lo tanto, lo natural es que deberían entonces aprovechar las facilidades que da este desastre ético y económico y mostrarnos la opción salvadora, pero a esta altura pareciera que no tienen un proyecto de país.
Pero no es así. Lo tienen, pero no lo pueden mostrar. Y el proyecto que impulsan es el que se está imponiendo en Europa: el ajuste. ¿Y por que el ajuste es la salvación del “desastre kirchnerista” para el país? Hemos pasado unos cuantos años en ajuste, y no voy a explicar lo que fue eso.
Y claro que no fue salvación para nadie, como no sea para los poderes fácticos, los que ya siendo muy ricos, con el ajuste se enriquecen aún más con la feroz transferencia de recursos que es tal “salvación” Entonces, porque tanto odio, tanta injuria y descalificación, tan feroz oposición a la inclusión, oposición que manifiestan disfrazándola de crítica a la “corrupción y el desastre kirchnerista”
Me resulta incomprensible esta actitud. Peeeeero…. si me pongo a pensar en El Mal, así con mayúsculas, la cosa me empieza a cerrar. No es fácil definir al mal, pero algunas nociones tenemos en la cultura humana sobre lo que sería el mal.
Básicamente lo podemos definir como la ausencia de bondad, de amor al prójimo. Pero cuando, desde lo político, desde el manejo de la cosa pública, hablamos del mal, hay una definición que  me parece muy acertada para hablar del mal, y es aquella que establece que el mal es aquello que no nos gustaría que nos pasara a nosotros mismos.
Concordamos la mayoría que una política económica debe tender a lograr bienestar y progreso para todos los habitantes del país en que se aplica. Esto es el bien. Hacer el mal, entonces, es hacer todo lo contrario. 
¿Y quienes estarían ubicados en el bien y quienes en el mal en nuestro querido país y porque no en el mundo? El Gobierno Nacional soporta diariamente toda una sarta de diatribas por parte de los medios y políticos opositores por la simple razón que, según ellos, esta administración no lleva al país hacia el desarrollo, hacia el pleno empleo.
Esta afirmación me permitió suponer que tenemos un consenso muy importante con la oposición: El desarrollo, el pleno empleo es bueno, es el bien. Ahora, la oposición, a la hora de aplicar políticas que lleven al progreso, al pleno empleo, ¿cuáles son las que apoya? ¿El aumento del consumo? No, porque provoca inflación: “hay que enfriar la economía”, dicen.
 Traduzcamos: enfriar la economía es menos empleo, menos crecimiento, más gente en la miseria. ¿Hace falta aclarar mediante que trasto se enfría la economía? ¿Pero no es que la derecha es progresista? ¿Nos explica el diestro costado de la política como tenemos que hacer para comprender que el ajuste es progreso?
Porque en Europa están aplicando criminales ajustes, y los presentan como el camino para llegar a la solución. Quedarse sin trabajo, mejor dicho, dejar sin trabajo a millones, es entonces, según la visión de la derecha, el bien. Es al menos un poco curiosa esta concepción del bien que tiene el conservadorismo.
Pero como la persistencia de los guardianes del progreso  en sostener que el ajuste es lo mejor, me pregunto: ¿se incluyen en las políticas de ajuste? No. ¿Y por qué?  Si es lo “mejor” ¿por qué no entregan la mitad de sus fortunas para el ajuste? No lo hacen porque son El Mal.
Hace pocos días, el Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que es opositor y de derechas (partidario del ajuste permanente) vetó una ley que daba protección a las cooperativas, formadas con empresas quebradas, hasta el año 2017.
¿Con este veto salvó al mundo?  ¿Salvó al país de la bancarrota? ¿Cuáles son los valores éticos en los que se basó para aplicar el veto? ¿Los ha hecho público?  ¿Qué tiene de ético desamparar a un grupo de cooperativistas? ¿Acaso las grandes empresas no necesitan protección o ayuda crediticia  y muy recientemente, varias gigantescas empresas debieron recibir salvatajes? ¿Por qué entonces no proteger a una cooperativa?
Desde hace varios años el mundo viven en crisis, y deberán convenir las derechas que el manejo de ese mundo no está en manos de la masa obrera mundial, si no que está en manos, como todos saben, de los bancos y demás grandes empresas, de los más ricos. Sin embargo, a pesar de ser los antedichos los “únicos capacitados” para manejar la economía del planeta, las crisis se producen. Y por supuesto hay que solucionarlas, esto es, pagarlas. ¿Y quienes la tienen que pagar? ¿Los potentados? No, los asalariados, la clase media. Esto, es el mal en estado puro.
Es innegable que el mal depende de quién lo interprete, que es subjetivo, y puede haber grandes diferencias de una cultura a otra. Pero convengamos que ocasionar sufrimiento a un ser humano no pareciera ser el bien. La miseria es una causa de sufrimiento bastante extendida y además innegable como tal, ¿cómo se puede afirmar que provocarla es un acto de amor, hacer el bien? Se puede llegar a esa afirmación si se es partidario del mal, si se cultiva la maldad, esto es, producir hechos que generan dolor, tanto físico como espiritual.
Y actitudes que prueban claramente quienes son los que provocan el mal en este mundo es lo que sobran. Por ejemplo, quién no ha escuchado decir a los empresarios “que el sueldo es inflacionario” Esta afirmación no resiste el menor análisis. Sin embargo es una “verdad” defendida a capa y espada por los poderes fácticos del mundo entero. La defienden porque son el mal. ¿Por qué lo digo? Si fuera verdad lo que dicen, ¿por qué no lo someten a una discusión y auditoría pública? Y defienden esta “verdad” como defienden desde hace siglos otra gran “verdad”: “los pobres son pobres por que quieren”
Pero cuando acusan a Cristina de no hacer nada por los pobres, ahí nos dejan en claro que los pobres existen por culpa de este Gobierno, que hay un sistema que los provoca, sistema con el cuál no tienen nada que ver. Esto es simple maldad. Son el mal y disfrutan haciéndolo.
Y llevan en nuestro país más de 100 años disfrutando de la riqueza que obtuvieron con el robo y aniquilación provocado durante la campaña al “desierto” comandada por el genocida J. A. Roca padre. Pero como se llenan la boca hablando de los pobres aborígenes. ¿No es prueba de la más profunda maldad “defender” a los aborígenes siendo ellos los beneficiarios del robo de millones de hectáreas a los pueblos originarios? Porque la Sociedad Rural Argentina, los medios  y políticos opositores actuales, son los continuadores de aquellos beneficiados, ya sea por posesión y disfrute de esas riquezas robadas, como por ideología.
Reconozco que encontrar un marco de referencia universal para declarar de manera tajante lo que es el bien y lo que es el mal  es probable que nunca se alcance. Quizás puedan encontrarse líneas de coincidencias entre unas culturas y otras, pero el carácter intransferible que en algunas sociedades tiene el individuo hacen imposible una conceptualización definitiva y de carácter universal de las nociones del bien y del mal.
Peeeeero…
 En el período que va de los años 1880 al 1916 se impuso, en lo económico, la inserción de nuestro país en la División Internacional del Trabajo, lo que nos llevó a ser productores y exportadores de materias primas y alimentos e importadores de la mayor parte de los productos elaborados, productos con valor agregado, que se consumían en el mercado interno;  y en lo político, la conformación de un estado moderno a partir de instituciones a imitación de la Europa de fin de siglo con el propósito de ofrecer todo tipo de garantías a los capitales extranjeros que invertían (saqueaban) en nuestro país.
Esta serie de medidas produjo dos hechos muy importantes: Nos impidió la industrialización y nos convirtió en colonia del imperio británico. Es harto conocido que quienes aplicaron este modelo, lo defendieron como lo mejor para el país. Si es lo mejor para un país, ¿cómo es que no lo eligieron para sí Inglaterra y Estados Unidos, por ejemplo? Estas dos potencias, ¿se convirtieron en imperios siendo exportadores de materias primas?
Está claro que quienes construyeron este país bajo la opción de la entrega y el subdesarrollo, la defienden, pero resulta que durante la aplicación de estas políticas el 80% de la población quedó en estado paupérrimo, mientras que esta “minoría iluminada” se enriqueció a niveles superlativos.
Para ellos fue hacer el bien, pero al autoexcluirse de las consecuencias negativas de sus manejos deja en evidencia una clara inclinación al mal en su más puro y siniestro estado. Convertir a un país en subdesarrollado y en una colonia, de ninguna manera puede ser asignado al bien.
Y lo más triste y peligroso es que hoy día esos ejecutores del mal fundadores y sostenedores del país, que  con Cristina a la cabeza, muchos queremos dejar atrás, tienen continuidad. Y no hace falta hacer  nombres.